El productor tecomense de tamarindo, Israel Gallardo Aparicio, destacó que este año ha sido particularmente favorable para el campo en la región, gracias a un temporal de lluvias constante y abundante, lo que ha permitido reducir costos en el riego y mantener una buena humedad en los suelos.
“Estamos muy contentos porque ha sido un temporal de lluvias muy regular, muy bueno, exageradamente bueno en cuestión de humedad. Con esto nos ahorramos energía eléctrica y muchos gastos en el sistema de riego”, expresó.
Gallardo recordó que la zafra pasada, que concluyó en los meses de mayo y junio, enfrentó dificultades debido a la escasez de agua, lo que redujo considerablemente la producción. Sin embargo, ese panorama se vio compensado por un precio histórico del fruto. “El año pasado hubo muy poca producción, pero el precio estuvo bien, hasta en 28 o 30 pesos nos compraron el kilo de tamarindo. Eso nos ayudó bastante a los productores”, señaló.
Para este ciclo y aunque los árboles no muestran una carga abundante, dijo que se espera un equilibrio positivo en el mercado. “No vemos una producción exagerada, pero sí suficiente. Los expertos de las empresas que compran el producto nos dicen que el precio se va a mantener muy bien. Lo poquito que haya creemos que va a tener un buen precio”, comentó.
Actualmente, afirmó, los árboles se encuentran en la etapa de crecimiento de las vainas, y será entre diciembre y enero cuando se determine con mayor certeza el volumen de la producción. “Ahorita apenas están creciendo, ya a finales de año se sabrá la cantidad real de tamarindo que tendremos”, concluyó.
Finalmente insistió en que el sector productor mantiene la expectativa de que este ciclo represente un balance favorable entre volumen y precio, lo que permitirá mantener la estabilidad económica de las familias que dependen de este cultivo en la región.