El presidente provisional del Consejo General del Instituto Electoral del Estado de Colima (IEEC), Juan Ramírez Ramos, afirmó que cualquier reforma electoral en México debe partir de 2 ejes fundamentales: preservar los mecanismos que funcionan y modificar aquellos que requieren actualización, siempre con el objetivo de garantizar procesos transparentes, imparciales y confiables.
Ramírez Ramos recordó que tanto la iniciativa de reforma presentada en su momento por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, como la recientemente anunciada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, coinciden en temas como la reducción de los costos de las elecciones, el recorte al financiamiento público de los partidos políticos y los ajustes en la representación proporcional.
Entre los aspectos que, a su juicio, deben preservarse, destacó el carácter ciudadano de las elecciones, a través de la integración de las mesas directivas de casilla mediante un doble sorteo. “Este procedimiento garantiza imparcialidad, aun con el costo que implica capacitar miles de ciudadanos”, señaló.
Asimismo, resaltó la importancia de mantener las casillas cercanas al domicilio de los votantes, la credencial para votar con fotografía -que tiene una cobertura del 98.3% en el país- y el escrutinio en casillas complementado con el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP).
Respecto a los cambios necesarios, planteó la reducción del financiamiento a los partidos políticos, principalmente en campañas, así como la incorporación gradual de urnas electrónicas y el voto por internet para agilizar los procesos y abaratar costos. Esos mecanismos, apuntó, además de ahorrar en boletas y materiales, podrían incentivar la participación de las y los jóvenes, quienes son el sector con menor participación en las urnas.
El consejero también subrayó la urgencia de que los institutos locales no se rezaguen en materia tecnológica, así como el fortalecimiento de la autonomía del INE y de los organismos electorales estatales, dotándolos de recursos suficientes, indicadores de transparencia y mecanismos de rendición de cuentas.
Finalmente, Ramírez Ramos consideró que una eventual reforma debe buscar el consenso más amplio posible y garantizar una competencia electoral “sana, transparente, equitativa, justa, igualitaria y libre de violencia”, como condición indispensable para el fortalecimiento democrático del país.