La presencia de cocodrilos en el estero Palo Verde, a un costado de la carretera libre hacia Cuyutlán, en Armería, ha generado preocupación entre pobladores y autoridades ambientales, quienes advierten que la práctica de arrojar restos de pescado en la zona estaría provocando que los reptiles se acerquen cada vez más a la orilla y, en algunos casos, intenten cruzar la vía.
El apicultor Francisco Larios, quien detectó al menos 2 ejemplares de gran tamaño el pasado lunes 1 de septiembre, explicó que la conducta humana es un factor determinante. “Una persona vino a tirar pescado aquí, y por eso se acercaron los cocodrilos; es muy peligroso que estén tan cerca de la carretera”, señaló.
El riesgo principal es que los animales irrumpan en la carretera y ocasionen un accidente, o que automovilistas y pescadores que se detienen en la zona se expongan a un ataque al acercarse al estero.
Tras el reporte que el mismo apicultor hizo al personal del Tortugario de Cuyutlán, ellos acudieron al lugar para verificar la situación. No obstante, hizo un nuevo llamado a la ciudadanía para que eviten alimentar o atraer a los cocodrilos con desechos, ya que esto modifica su comportamiento natural y los pone en mayor contacto con las personas.
Personal del tortugario indicó al apicultor que la presencia de cocodrilos en cuerpos de agua de la región es normal, pero su proximidad a caminos y asentamientos aumenta el riesgo. Por ello, insisten en extremar precauciones, no arrojar restos de pescado ni basura y mantener distancia de esos animales.